Tranquilidad...Naturaleza...Cielo azul...Mar turquesa, son algunos de los atributos de este pedacito de paraíso terrestre. Corumbau sin duda es uno de los secretos mejor guardados de Brasil.
Corumbau significa "lugar distante" en la lengua nativa Pataxó y debe su nombre a un punto de la arena de ancho que se extiende hacia el mar, donde el horizonte parece desvanecerse y casi se puede tocar el infinito.
Se trata de una de las playas más codiciadas del litoral, a casi 90 kilómetros del municipio bahiano de Prado, que incluye otras arenas muy poco exploradas como Cumuruxatiba, do Tororao y Barra do Cahy, donde los colonizadores portugueses hicieron una primera parada antes de desembarcar en Porto Seguro. La sensación de estar (re)descubriendo el paraíso se intensifica cuando, desde el océano, aparece el monte Pascoal en medio de la vegetación virgen.
Corumbau aún impone algunos desafíos dignos de exploradores, como los kilómetros de caminos de tierra que hay que recorrer para alcanzarla y la falta de infraestructura de servicios (hay puestos de gasolina y bancos sólo en el centro de Prado o en la vecina Itamaraju).
Existen varias maneras de "llegar al paraíso": desde Porto Seguro se puede acceder por vía aérea en avión o helicóptero (20 minutos de viaje); por vía terrestre en 4x4 (4 horas de viaje); o bien por vía terrestre hasta Praia do Espelho (1 hora y media de viaje) y luego en lancha hasta Corumbau (20 minutos de viaje); desde Trancoso en lancha hasta Corumbau (20 minutos de viaje). |