Belem, las personas suelen preguntar “¿Usted va a salir antes o después de la lluvia?”. Debido al clima cálido y húmedo, llueve prácticamente todos los días. Y por más increíble que eso pueda parecer, la lluvia cae casi a una hora definida: alrededor de las 3 de la tarde. La capital paraense atrae la atención por diversas razones. Las frutas deliciosas, que sólo existen allí; los trazos bien definidos de la cultura indígena; construcciones arquitectónicas increíbles; además de una cultura popular riquísima.
En la “ciudad de los mangos”, parte de la historia brasilera puede ser vista de cerca. La Ciudad Vieja abriga recuerdos de una época anterior al ciclo de la goma, que están estampadas en las calles estrechas y en los casarones con fachadas de azulejos, y que datan del siglo XVII. Un paseo por la ciudad puede conducir al visitante a un viaje por el tiempo.
En Belem usted también puede aprovechar el encanto de la vegetación nativa. Inspirado en el "Bois de Boulogne" (París), el Bosque Rodrigues Alves muestra un poquito de la bella Amazonia. Hay deliciosos lugares para realizar caminatas, meriendas o simplemente para disfrutar de la convivencia con la naturaleza. Pero, el mayor atractivo de la ciudad es el Mercado “Ver-o-Peso”(Ver el peso). El lugar tiene ese nombre porque, en el período colonial, eran hechas allí las verificaciones de peso de las mercancías, que llegaban por el puerto de al lado. Hoy, es un lugar donde se encuentra de todo. Las maravillas de Belém le esperan. |